El método Kaizen nació en Japón en el contexto de la II Guerra Mundial, y hoy es reconocido como uno de los grandes baluartes de la cultura japonesa que llevó al país a resurgir tras el conflicto.
¿Qué es esto del Kaizen?
Kaizen es el principio de la mejora continua. Este consiste en aplicar mejoras casi insignificantes repetidamente a lo largo del tiempo, sumado a la magia del interés compuesto que se va creando, lo que ofrece un progreso más que remarcable.
Los japoneses lo crearon inicialmente para aplicarlo a la producción, pero relamente es aplicable a cualquier campo. Desde tu desarrollo personal hasta los departamentos de tu empresa pueden ver un crecimiento exponencial a través de esta filosofía.
Un ejemplo asombroso.
Vamos a verlo de forma práctica, te aseguro que el resultado te va a sorprender.
Al comienzo de año, eres 1. Cada día mejoras algo en un 1%, es decir, multiplicarás por 1,01. Si optimizas esa pequeña parte todos los días del año estarás mejorando 365 días un 1%. En fórmula matemática, estaremos elevando (1.01) a un exponente 365. El resultado: te habrás convertido en 37,78.
Sí, empiezas siendo 1 y terminas siendo casi 38 veces mejor. No quiero imaginar si esto lo replicas durante una década, piensa hasta dónde podrías llegar con tu negocio, tu físico, tus relaciones personales, tu departamento de trabajo, etc.
Llévalo a tu vida y a tu empresa.
Como hemos visto, esto es aplicable en cualquier ámbito. Piensa en tu empresa, empiezas a optimizar procesos de forma minúscula cada día y al final de año habrás conseguido una mejora que pensabas inalcanzable. Incluso míralo por departamentos, cada uno de tus empleados optimiza el 1% de su jornada cada día (menos de 5 minutos) y el beneficio para la empresa al cabo del tiempo no dejará a nadie indiferente.
O simplemente piensa en tu vida personal, no sólo para ser más productivo, sino mejor persona en todas las facetas. Cada día del año haz un pequeño ajuste: un kilómetro más en esa carrera, 10 minutos más de calidad con la familia, una discusión evitada por tu autocontrol, una sonrisa a cada persona... Te invito a probarlo, no resta ni suma, de hecho multiplica, y eso nunca puede ser malo.
Hazlo parte de tu filosofía.
No obstante, cualquier hábito hay que interiorizarlo y trabajar cada día en ello para reforzarlo. Por ello, esto no es un experimento para tus objetivos de año nuevo, sino que es una promesa a largo plazo de mejora continua. Porque la magia está ahí, en que es continua y por tanto se vuelve casi infinita en el tiempo. Si tu empresa aplica esto como parte de vuestros valores, podréis alcanzar hitos espectaculares en el largo plazo.
En Pymetic, hemos confiado desde el principio en que la clave del éxito está en la constancia y la mejora, por ello nos dedicamos a optimizar procesos y hacer más eficientes a las empresas. Los resultados quizá a corto plazo no sean visibles, pero en el largo plazo todos verán que el esfuerzo mereció la pena. El Kaizen es uno de nuestros pilares fundamentales, aplícalo desde ya en tu filosofía, no te vas a arrepentir.